Uno podría divagar acerca de la capacidad que la prensa tiene para crear heroes enfocando la atención de la gente en una dirección por sobrexposición, porque sin pensarlo mucho, me vienen a la cabeza ejemplos de heroismo que pasan totalmente desapercibidos por los medios de comunicación.

Sin embargo, me parece que hay que mirar las cosas con una perspectiva más amplia para ver que realmente de lo que se trata en última instancia es de ganar dinero. Porque es obvio que el tráfico de información se encuentra en manos de una industria que como cualquier otra busca maximizar sus beneficios.

Te paras a pensar un poco en la noticia y te das cuenta de como la hacen crecer a base de multidifusión, como crean heroes y villanos para mantener vivo el interés de la gente y mientras tanto, hacen caja jugando a dos bandas con la baraja marcada. Y así mientras una persona está en coma por defender a otra, resulta que los medios pagan por tener a quien defiende al agresor, se escudan en la libertad de información y en que es una entrevista demandada y todas las demás chorradas de siempre, pero olvidan mencionar el pequeño detalle de los enormes beneficios empresariales que se esconden detrás de una decisión así, que poco tienen que ver con el hecho de transmitir información veraz a una sociedad.

Este no es más que uno de muchos ejemplos de como funciona el chiringuito, realmente nosotros no recibimos noticias, sino una selección de datos con un interés relativo, en función de los propios intereses económicos del medio y digo económicos porque los intereses políticos se reducen al final a dinero excepto en la cabeza de los militantes que son quienes permiten que se mantenga el mamoneo.