Juan Manuel de Prada

Con lo atrevida que es la ignorancia me sorprende que Juan Manuel de Prada no haya muerto haciendo malabares con motosierras. Leyendo un artículo que publica en el semanal me encuentro con algunas perlas que me encienden. Es sorprendente que alguien compare los milagros que aparecen en la biblia con la inversión en bolsa (Por muy sarcástico que se pretenda ser). Iguala la superstición más garrula con lo que el define como las "abstrusas leyes bursátiles", demostrando claramente que en el colegio era el taradete incapaz de aprender ni como se calculaba el interés simple, algo bastante común por otra parte entre algunos "intelectuales" de letras (y más si cargan hacia la derecha) que son los que últimamente niegan el cambio climático como en el pasado sus abuelos negaron que la Tierra era redonda (iba a mencionar la evolución, pero como siguen negándola).

También compara la especulación científica con creer en extraterrestres capaces de curar a distancia si lo deseas mucho, mucho. Parece que no tiene nada claro como funciona el método científico y no parece entender que eso que él considera especulaciones se basan en argumentos más sólidos que las palabras de esquizofrénicos vestidos con túnica hablando con su amigo invisible.

Quizás la mejor perla sea esta "El escepticismo de nuestra época consiste básicamente en negarse a entender, no ya la existencia, sino la posibilidad de una realidad trascendente". Este tipo de argumentación me permite a mi hacer afirmaciones como "No puedes negar la posibilidad de que tenga un dragón azul en mi garaje, cierto que es invisible e intangible y que los conocimientos científicos actuales no me ofrecen la más mínima prueba de su existencia pero no puedes negar que existe esa posibilidad, luego tengo un dragón azul en mi garaje".

A un analfabeto funcional con pretensiones como es este tio, antes de permitirle publicar artículos así, deberían obligarle a leer por ejemplo algunos libros de Carl Sagan como por ejemplo "El mundo y sus demonios", para que se fuera introduciendo en el mundo de la divulgación científica y comenzara a olvidarse de esas creencias estúpidas a las que da rango de verdad.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¿¿Tú también tienes un dragón azul?? Qué hijoputa el gnomo que me lo vendió, que me juró que era el único que quedaba...

Paria dijo...

Vaya, pues a ver si los apareamos y conseguimos dragoncitos, que dicen que su placenta se cotiza muy bien entre los cienciólogos (A ver si hay alguien con pelotas de decirme que se reproducen con huevos)