Viaje a Escocia II


A lo largo de la Royal mile (High street) se concentran las grandes atracciones de la ciudad, desde el castillo de Edimburgo, del que parte la milla real, a la cámara oscura, un artefacto construido hace 150 años y que permite ver panorámicas de la ciudad, se trata básicamente de un periscopio y espejos, pero supongo que hace 150 años sería como los Iphones hoy en día.




Un poco más abajo te encuentras con Mary King´s close, recomendable para morbosos como yo, ya que allí enterraron viva a la gente durante la peste negra. También en High street está la catedral de Saint Giles, donde por cierto estuve escuchando un concierto de piano y acordeón que me gustó, ¿En qué me convertirá eso?

Así hasta alcanzar el final de la milla real, allí se encuentra el palacio de Holyrood house, que tiene una abadía en ruinas en uno de sus laterales que me encantó, posee un halo de decadencia romántica que me trae a la memoria los mitos góticos. También aquí, al final de la milla, está el parlamento escocés, que personalmente, me parece una aberración que jamás debería haberse construido y por lo que tengo entendido, un gran número de escoceses opina igual. Pocos edificios más feos te puedes encontrar, bueno, quizás los que construye Calatrava. El caso es que el edificio literalmente destruye la estética de todo el lugar.


Si a alguien le pasa como a mi y le encantan los dulces, no se puede marchar de Edimburgo sin probar el fudge, una especie de caramelo blando, que al menos tal y como yo lo compré, se vende al peso en trozos sacados de tabletas con una forma similar a las de turrón. De sabores que van de la menta al Whiskey. Yo lo encontré en una pequeña pastelería que tan solo se dedicaba a vender eso, bueno también servían te y café., estaba bajando High street hacia Holyrood house. No parecía enfocada al turismo, que es algo que ocurre con casi todo lo que hay en esa calle, parecía más bien una pastelería tradicional, de las de toda la vida, lo que para mi le da de antemano un millón de puntos.




Si te gusta la pintura, tienes el Naional gallery al lado de los jardines del castillo, aunque a mi la pintura no es que me motive demasiado. El museo nacional de Escocia tiene, sin embargo, cosas que si que me gustaron, como una espada Claymore del rey Robert "The Bruce" que ya quisiera yo tener colgada a la entrada de mi casa. Pero bueno, no quiero hacer una guía turística de Edimburgo, digamos que es una ciudad para ver y con un ambiente espectacular, al menos en Agosto. Además, debería ser obligatorio tomarse una pinta en un pub escocés al menos una vez en la vida (Después de todo, los hay que peregrinan a sitios bastante más aburridos)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Lastima que la espadona esa solo sea ceremonial, con placer haria rodar unas cuantas cabezas para construir una piramide y sentarme en ella

ENRIC dijo...

Hola Paria sexador!
Lo de Sex me ha suliveyado, lo de ador no me viene en el diccionario de la RAE. Mequedo con el SEX.
Solamente comentarte que la envidia me corroe las entrañas por tu viajecito a Scotland. A mi Escocia me evoca nombres de genios musicales, ahí va: Phil Cunningham, Martin Bennett,Runrig, Silly Wizard, Alasdair Fraser, Paul Mounsey y Wolfstone. Son siete magníficos. Prueva y verás.
P.S. Nen, tu blog me gusta mucho, si no te importa asomaré mis narices por aquí de vez en cuando. He llegado vía/blog "Señor insustancial", ese tipo genial.
Nos leemos,
Bona nit/Bona nueche/Buenas noches

Paria dijo...

Que grandes runrig, the year of the flood, pero te dejas a mi grupo favorito, Capercaillie, la voz de Karen Matheson es simplemente genial y por cierto pude verlos en el festival interceltico de Aviles. Tengo que buscar algo de Martin Bennet, Pul Mounsey y Silly lizard que a esos si que no los escuche todavía. Venga nos leemos...