Juegos

En alguna ocasión he leído por ahí que es durante la pubertad cuando establecemos una especie de "imagen de búsqueda" del tipo de mujer u hombre que nos atraerá a lo largo de la vida, nuestro modelo estandar favorito, rubias, morenas, calvas, lo que sea. No se hasta que punto una afirmación así tendrá argumentos científicos que la sostengan, porque me resulta bastante simplista. Me imagino a un adolescente de los ochenta, generando lo que será su modelo ideal para el futuro, consistente básicamente en cardados y hombreras. El trauma que debió suponer para él la entrada de los años noventa le costaría años de terapia. Sin embargo, mirando hacia atrás, tengo que reconocer que en mi caso particular, esa teoría del modelo estandar parece bastante acertada, porque siempre me han gustado morenas, delgadas, de pelo liso y largo. Algún día tendré que consultarlo con mi terapeuta.

El caso es que yo creo que con los videojuegos ocurre algo semejante, durante la infancia desarrollamos un gusto por determinados tipos de videojuego, al menos en mi caso es así. No se me ocurre otra manera de explicar que muchos de los videojuegos de ahora me parezcan una mierda, por muy superiores técnicamente que sean. Lo siento, pero jamás entenderé como es posible que Pokemon triunfase, en este caso, tanto la serie como el videojuego. Donde esté una buena dosis de sangre de los caballeros del zodiaco que se quite Pikachu. A lo que voy, como me he pasado un par de horas jugando a emuladores, me ha dado por escribir sobre los que han sido mis juegos favoritos.

Mi juego favorito, ayer, hoy y para siempre es "Super Mario Bros 3", un juego de la NES, aquel cajón gris de 8 bits de Nintendo. Yo nunca llegué a tener "el cerebro de la bestia", me toco vivir el reinado de las consolas de 16 bits sin llegar a catarlas, pero bueno, son cosas que fortalecen el caracter, así empezó Perez Reverte, ¿No?. Este juego es, sin duda, la perfección hecha plataformas y no debo ser el único que lo pensó, porque a día de hoy hay cientos de versiones piratas que utilizan el motor gráfico para crear, en algunos casos, juegos totalmente nuevos basados en él. Lo cual es algo que nunca agradeceré bastante, porque me sigo echando un montón de partidas gracias a ellos. Desde aquí recomiendo el "Mario adventure" por citar solo uno de esos hacks.


Otro juego que sin duda me marcó fue el "Out run", no tendría más de seis años cuando jugaba a el con mi primo. Jugábamos en uno de esos armatostes con volante y pedales tan ochentero. Recuerdo que fue la atracción principal de un verano que pasé con mis abuelos en Valencia de Don Juan, lugar al que los asturianos emigraban en verano long time ago. El caso es que ese verano mis padres y mis abuelos decidieron mandarnos a mi y a mi primo a aprender a nadar, una auténtica tortura, encima teníamos que madrugar. Una curiosa manera de hacerme odiar para siempre ir a las piscinas. Deberían obligar a los niños a fumar crack de pequeños, seguro que sería el mejor método para que no se volvieran a acercar a las drogas. Al menos, después de tragar litros de agua con cloro y a saber que más productos químicos de origen orgánico, nos quedaba el consuelo de ir a tirar nuestra paga a esa máquina. Aun tengo grabada en la cabeza su banda sonora, me sorprende que no haya bares donde pongan ese tipo de música y que sin embargo si los haya donde ponen jazz latino.


Durante el instituto mis juegos favoritos fueron los de hostias, bien hostias de uno en uno, o bien los de hostias masivas, en los que te pegabas con todo un barrio a la vez. "Street fighter", "Cadillacs and dinosaurs", "Warriors of the fate", se contaban entre mis favoritos. Aunque también había algunos juegos de plataformas bastante desconocidos entre mis preferidos, como el "Biomechanical toy".


El "Super pang" fue otro juego al que también dediqué tiempo, no debería decirlo, porque siempre se le consideró "el juego de las tias" en las salas de máquinas, esos antros de socialización que tristemente han caído en el olvido. Recuerdo que lo de romper bolas se me daba de coña hasta que alguna chica se ponía a mirar mientras esperaba para jugar, a partir de ese momento las bolas no hacían más que darme problemas, toda una metáfora de la vida.

En el ordenador, probablemente los juegos a los que más tiempo dediqué fueron las aventuras gráficas, "Indiana Jones and the fate of Atlantis", "Indiana Jones and the last crussade", "Monkey Island", la edad dorada de Lucas arts. Donde estén estos que se quite "Grand thief auto", vale, ahora podeis empezar a blasfemar. Me sorprende a mi mismo ser un nostálgico de los videojuegos, porque para el resto de cosas me dedico a criticar a los nostálgicos, debo ser un gran hipócrita. El día del juicio final creo que saldré a deber horas de vida por el tiempo que perdí en estos juegos, probablemente cuando palme, en vez de pasar mi vida ante mis ojos, pasará una pantalla del "Super Mario Bros".

5 comentarios:

Nym dijo...

El mejor juego de plataformas EVER es Warioland. Recuerdo que salió a la venta Warioland II un par de semanas antes de mi selectividad... y claro, ¡no voy a ponerme a estudiar teniendo que acabarme el juego, por Dios!
Recuedo que también tenía un DuckTales que me volvía loca, con el Tío Gilito que rompía bloques a golpe de bastón... Joder, dónde coño tengo la GameBoy, que me está apeteciendo horrores echarme una partidilla, je je je.

Todo aquel juego que implicara 3D lo he venido desechando sistemáticamente. Me marean.

Y, quitando GameBoy y tridimensionalidades varias... Tycoons variados, Sims/SimCity variados y revientapelotas variados.

Por cierto, lo del jazz latino te lo has inventado. No puede existir semejante aberración.

Carla dijo...

Claro, Mario tiene la culpa de que encuentre sexualmente atractivos a los señores gordos con bigote. :/

Javier López dijo...

Y a los Lemmings nunca jugaste?. Jamás he pasado ratos tan divertido y de comerme tanto la cabeza, parece increíble que esos bichitos tan pequeños tuvieran tanta gracia y tanto ingenio. Ha sido mi juego, junto con el Tetris, al que le cogí un vicio que podría haber competido contra cualquiera y habría ganado. Era como Fernando Alonso a los mandos de los cursores...

Paria dijo...

ooh Nym, el ducktales...lo tenía yo para mi NES, de hecho, creo que tengo en el portatil la rom del juego para el emulador. Por dios, ¿Qué coño le veis a los Sims?

Zooplancton, ¿Es esa la razón por la que tienes un poster de cachuli en tanga en la habitación?.

Javi, tengo que reconocer que los Lemmings nunca me gustaron, los juegos que me gustan tienen que tener explosiones, peleas o fontaneros lisergicos, soy mu simple.

Javier López dijo...

Jajaja bueno lo perdono porque con el irreverente y estupendo post de dios que has escrito hoy, me has hecho pasar un buen rato.